El tema que vamos a comentar puede parecer lógico, pero la verdad, el juego cumple un rol importante en nosotros desde pequeños ya que es la principal actividad por la que nos comunicamos e interactuamos con los demás, exploramos la realidad que nos rodea, establecemos relaciones con los objetos, las imágenes, las palabras, nuestras emociones… es el medio por el que se comprende cómo es el mundo y la manera en que nos integramos en él. El juego es una actividad social por excelencia, en la cual pueden verse claramente reflejadas las características del pensamiento y los sentimientos.
A la actividad del Juego se le asocia habitualmente con la infancia y con la diversión, pero lo cierto es que se manifiesta a lo largo de toda la vida de las personas. Es una actividad inherente del ser humano, relevante en la vida de todos, y surge de una necesidad innata de explorar, entender y controlar el entorno, aumentando a su vez la motivación y la iniciativa.
Hoy en día un gran número de psicólogos y educadores opinan que la infancia no es un simple paso hacia la edad adulta, sino que tiene un valor concreto en sí misma, ya que la infancia se encuentran muchas de las claves de lo que será la persona en un futuro, afirmación que había sido apoyada por Sigmund Freud cuando afirmaba que «todo hombre es su infancia«.
Ciertamente, la actividad del juego en la infancia es el período de mayor desarrollo. Jugando se desarrollan las aptitudes físicas, la inteligencia emocional, la creatividad, la imaginación, la capacidad intelectual, las habilidades sociales, y se afianza fuertemente la personalidad. Además, a través del juego se transmiten valores culturales, normas de conducta hasta tal punto, que para un niño, va a influir tanto en su capacidad posterior para adquirir y asimilar nuevos aprendizajes, como en su futura adaptación a la sociedad y al mismo tiempo, disfruta y se entretiene.
La estimulación y desarrollo de la creatividad del niño es primordial desde pequeño, porque es en ese momento en el cual podemos prepararle y estimularle en el pensamiento creativo. Ello hará posible que encuentre soluciones a las dificultades y desafíos que se le presenten en la vida, de una forma sencilla y sobre todo original. Se aprende a través del juego multitud de papeles distintos por medio de la observación y la imitación. Es por ello, que estimularlos a jugar creativamente puede ser una interesante manera de que desarrollen diferentes habilidades.
Pero como dijimos al comienzo del post, el juego es inherente del ser humano, y es por ello, que en todas nuestras etapas de la vida, pensar en el juego y llevarlo a cabo, no es un absurdo sino un complemento. Actividad, que además de hacernos felices por la adrenalina que provoca, nos introducimos es todo un mundo de aprendizaje que sacamos de esa experiencia, y si es compartida, mejor aún.
Entonces, cuando volvemos a jugar creativamente!!??